"El Amante" de Harold Pinter .Versión Susana Gómez
"El Amante" de Harold Pinter. Lecool.madrid
Que una obra de teatro se reponga por tercera vez es todo un signo de éxito, o más bien, todo un milagro dado los tiempos que vivimos, que resultan especialmente complicados para la cultura. Pero ese es el caso de “El amante”, la versión de Susana Gómez y la compañía Funfanfarria del clásico de Harold Pinter, que se representa de nuevo estos días en La casa de la portera. Pinter, maestro del teatro del absurdo, nos dibuja aquí una escena surrealista en la que un marido pregunta con toda normalidad a su esposa sobre la visita de su amante. A lo largo de la obra, ambos mantienen una actitud de lo más civilizada y calmada sobre un asunto que habitualmente arrastra a los seres humanos hacia sus más bajos instintos. Sin embargo, no todo es tan absurdo ni tan sencillo como parece; esa familiaridad y aparente tranquilidad esconden un vacío que resulta incluso más desgarrador que el posible estallido del drama. Una obra que desorienta y sorprende al espectador y que, además, se representa en el peculiar espacio de La casa de la portera, un antiguo piso reconvertido en teatro.
Que una obra de teatro se reponga por tercera vez es todo un signo de éxito, o más bien, todo un milagro dado los tiempos que vivimos, que resultan especialmente complicados para la cultura. Pero ese es el caso de “El amante”, la versión de Susana Gómez y la compañía Funfanfarria del clásico de Harold Pinter, que se representa de nuevo estos días en La casa de la portera. Pinter, maestro del teatro del absurdo, nos dibuja aquí una escena surrealista en la que un marido pregunta con toda normalidad a su esposa sobre la visita de su amante. A lo largo de la obra, ambos mantienen una actitud de lo más civilizada y calmada sobre un asunto que habitualmente arrastra a los seres humanos hacia sus más bajos instintos. Sin embargo, no todo es tan absurdo ni tan sencillo como parece; esa familiaridad y aparente tranquilidad esconden un vacío que resulta incluso más desgarrador que el posible estallido del drama. Una obra que desorienta y sorprende al espectador y que, además, se representa en el peculiar espacio de La casa de la portera, un antiguo piso reconvertido en teatro.
Notas de la directora sobre la obra:
A la pregunta del marido “¿Viene tu amante hoy?” podemos imaginar una respuesta contrariada, arrepentida, furiosa; incluso irónica, divertida o resentida por parte de ella. Pero un distraído “Mmmm”, mientras la estupenda Sara limpia un cenicero, no nos cabe en la cabeza. Y lo increíble no es solo eso, sino que el marido mantenga su civilizada conversación y flema mientras se informa acerca de los detalles de la visita de su supuesto rival. ¿Qué sucede aquí? ¿Qué anomalía estamos presenciando? ¿Hasta dónde llega el teatro? Pinter nos sumerge en el enigma de las palabras y los silencios; nos presenta la ambigüedad de los sobreentendidos sobre los que se mantiene una relación y que, como espectadores, creemos poder descifrar. El autor parece diáfano en su juego: muestra sus cartas y presenta a sus personajes como seres poliédricos: complejos pero perfectamente definidos… de modo muy superficial. Cada partida, cada función es una posibilidad para la catástrofe, pero lo que queda al final no es más que vacío; ni siquiera se da la posibilidad al drama. En un intento desesperado por devolver la vida a las palabras, los protagonistas rompen las reglas del juego, traicionan el rol asignado y abren la puerta a lo inesperado, que finalmente no es más que la constatación de una ruina: la textura seca del jamón tras una fría temporada en la nevera.
Fiel a la complejidad y la finura en la disección de personajes y situaciones que caracteriza la obra de Harold Pinter (Premio Nobel de Literatura, 2005), El amante pone en juego la intensa pulsión sexual de sus personajes en ese marco sin sobresaltos y lleno de máscaras que caracteriza la vida cotidiana burguesa.
Cada frase convierte el confortable suelo de la casa en arenas movedizas, en una trampa sin salida: el drama y la ironía cómica se entremezclan hasta borrar absolutamente sus contornos. En esta ciega huida hacia delante, nada es lo que parece, pero todo es tan real como lo vemos: el teatro en una de las más lúcidas realizaciones conceptuales contemporáneas.
Ficha técnica: Cía FUNFANFARRIA
El amante de Harold Pinter .Versión de Susana Gómez
Dirección y versión: Susana Gómez
Actriz: Sara Nieto (Sarah)
Actor: Gustavo Gonzalo (Max, Ricardo, Lechero)
Traducción: Susana Gómez y Jorge Cano
Diseño Gráfico: Jorge Cano
Fotografía: Pablo Quejido
Prensa: Begoña Minguito
Estrenada en 4 de Marzo del 2013 en La Casa de la Portera, en cartel durante 12 semanas en doble función.(Reestrenos Julio y Septiembre 2013)
Sinopsis:
Richard y Sarah llevan un monótono matrimonio desde hace diez años. Él es un gran empresario, ella una insatisfecha ama de casa, ambos cansados de esta relación convencional y aburrida deciden reconstruir su relación de pareja inyectándole frescura y diversión a su rutinaria relación.
Directora y adaptadora: Susana Gómez
Como directora teatral ha dirigido El jardín secreto en el Teatro de la Abadía, A toda revolución con el Teatro del Intrépido, Memoria de un esclavo en el Teatro Jovellanos y Reyno, Cárcel de Segovia- Microteatro por dinero Madrid.
En su labor como directora de escena en ópera ha realizado Don Giovanni en la temporada de Ópera de Lima (Perú), Turandot, Norma y Un ballo in maschera con la Fundación Ópera de Oviedo.
Ha sido ayudante de dirección de varios de los más prestigiosos directores de escena y ópera españoles y extranjeros: Hansgünther Heyme (Mercader de Venecia y Rey Lear), José Luis Gómez (Mesías), Rosario Ruiz Rodgers (El señor Puntila y su criado Matti y Los enfermos), Helena Pimenta (Luces de Bohemia), Jesús Cracio (Todos los peces muertos siguen el curso del río y Baldosas), Gustavo Tambascio (Norma, Lulú, Dulcinea, Don Chischotte, La italiana en Argel), Calixto Bieito (Carmen), Willy Decker (Muerte en Venecia), Claus Guth (Parsifal), David McVicar (Manon) y Robert Carsen (Jenufa), entre otros.
Ha sido y es profesora en talleres de creación teatral e interpretación para distintas instituciones: Conservatorio de Tarragona, Festival of Theatrical Arts in Malaysia, RESEO (Opera Europa) y Centro Cultural Puertas de Castilla (Murcia), entre otros.
Formación académica y teatral
-MA in Theatre Directing. Middlesex University (Londres)-Gitis Academy (Moscú);
- Licenciatura en Filología. Doctorado en Teoría de la Literatura. Universidad de Oviedo;
-Cursos de interpretación, movimiento escénico, danza y voz con Etelvino Vázquez, Joanna Merlin, Anna Pocher, Natalia Svereva, Carlos Lipsic, Mar Navarro, Marcello Magni, Tapa Sudana, Per Brahe, Adriana Barenstein, Francesc Bravo, Irina Promptova, Julio Pardo y Vicente Fuentes entre otros.
Notas de prensa
La república cultural.
Julio castro
FUNFANFARRIA te convertirá en EL AMANTE de Pinter.
Un Pinter de esos en los que el humor se siente más a flor de piel, es desvelado por esta pareja, Sara Nieto y Gustavo Gonzalo, dirigidos ahora por Susana Gómez, que es también quién ha adaptado la obra del genial autor británico. Son la compañía Fun-Fanfarria, que, sinceramente, nunca defrauda en sus puestas en escena, por su profesionalidad, por su experiencia, y porque viven el teatro como si fuera su propia vida, sin ningún complejo.
Para quien no conozca este trabajo de Harold Pinter, servirá de aproximación a una parte de los textos del autor, pero, sobre todo, servirá para pasar un buen rato, dilucidando la peculiar vida de este matrimonio, un tanto atípico, que habla de sus respectivos amantes, de la manera de llevar su relación de pareja con respeto y amor, pero con el sexo fuera de casa.
“¿Has pensado que tú pasas la tarde siéndome infiel, mientras yo estoy en la oficina revisando balances…?”, pregunta Gustavo a su mujer “Pero yo te amo a tí”, responde Sara con firmeza, aunque sin mayor preocupación “¡¿Qué?!…” se sorprende él. A medida que avance la obra, iremos descubriendo la manera tan divertida de relacionarse que tiene entre sí, los juegos que apuntan a lo que no es (no porque deban hacerlo o no, sino porque esta historia es así, sin sojuzgar nada), los malentendidos que se crean entre el público, y cómo logran subir de intensidad en la trama que nos muestran, para terminarlo en un punto álgido, que resuelve sin más, pero con nuestra continua complicidad.
Y es que en la historia de este matrimonio, todo es perfectamente correcto, todo discurre dentro de los parámetros de “su normalidad”. Y si algo cambia, o amenaza con estropear su matrimonio, basta con cambiar los parámetros o el juego, no vaya a ser que encontremos la realidad.
Son normas acordadas, son juegos consentidos, propiciados, incluso institucionalizados. Se podría decir que, tras el humor de esta pareja formal, en la que las apariencias son lo que cuenta (“no hagáis ruido, no vayan a escucharos los vecinos…”), cabe encontrar el paralelismo de una sociedad en la que todo el mundo piensa que hay cambios, luchas o tensiones que podrán hacer moverse al sistema de su posición. Pero, cuando todo indica que se romperá la cuerda y saltarán por los aires las piezas del juego, se modifican las normas, y volvemos a caer cada cual en su casilla, y alguno en otra más atrás. Una manera también de facilitar la huída de la realidad en la sociedad para quienes deseen vivir otro libreto. Porque Pinter era muy crítico, no sólo en sus planteamientos y declaraciones públicas, sino en sus trabajos literarios y dramatúrgicos también, así que podemos encontrarle en cualquier lugar.
O cerrar los ojos de ver, y sólo mirar este estupendo desarrollo teatral.
A la idea que vemos, le va perfectamente el encajonado desarrollo en tan reducido espacio, como también se le ajusta el lenguaje formal y rígido que asume Gustavo en su papel principal (el de marido), y el de estirada mujer que enloquece ante sus debilidades, cuando es el turno de Sara. Los desdoblamientos que marcan la obra tienen una más que correcta recepción en el público, gracias a los sutiles, pero claros, cambios de registro de sus intérpretes. En fin, buena labor actoral y buena dirección, para una idea sencilla en la forma de plasmarse, y compleja en su trasfondo.
Como digo, Fun-Fanfarria nunca decepciona. Pudimos verles como compañía en Sueños salados, y en Paradise Cabaret, con formatos de obras muy diferentes al actual, pero con el sello propio, que ahora completa Susana Gómez con su trabajo.
Artez Blai
En cada frase del texto el confortable suelo de la casa se convierte en arenas movedizas, “en una trampa sin salida: el drama y la ironía cómica se entremezclan hasta borrar absolutamente sus contornos. En esta ciega huida hacia delante, nada es lo que parece, pero todo es tan real como lo vemos: el teatro en una de las más lúcidas realizaciones conceptuales contemporáneas”.
Miguel Carreira, Factor crítico.
“El amante no deja de ser una representación tradicional en un espacio atípico. Y lo cierto es que funciona, bien impulsada por el trabajo de los actores”.
dossier_el_amante_1actualizado.doc | |
File Size: | 1072 kb |
File Type: | doc |